"Tú no eres casi nada en mi poema, nadie. Una promesa incumplida. Eso ya no tiene remedio. Ya no puedo llenar tu nombre de vida, como hice con Dido. Pero está ahí, la vida que no te di, está ahí, en ti. Así que ahora, cuando ya es demasiado tarde, tienes que dármela. Mi vida. Mi tierra de Italia, mi esperanza de Roma, mi esperanza".
Lo que Virgilio nos cuenta en la Eneida es la historia de Eneas, el carismático, valiente y honesto héroe que sobrevive a la guerra de Troya y emprende un largo viaje lleno de aventuras a través del Mediterráneo en busca de su destino (Italia), donde se casará con Lavinia y fundará la ciudad que será el origen de la futura Roma. Sin embargo, pese al papel fundamental de ella en la historia, sus apariciones en la obra son escasas, siempre es mencionada en relación a otros personajes y nunca habla (ni siquiera en escenas realmente impactantes y en las que es resulta fundamental su presencia y su sentir).
Lo que hace Ursula K. Le Guin con esta novela es darle la voz que no le dio Virgilio, haciendo que sea ella misma quien nos cuente su historia de principio a fin, y lo hace con pleno respeto a la obra del poeta (ella misma lo definió como “un acto de gratitud, una ofrenda amorosa”). Le Guin se centra en los seis últimos libros de la Eneida, logrando que la historia encaje a la perfección, porque no se trata de “terminar” la obra del poeta (Virgilio la consideraba incompleta), tampoco se trata de completar la historia de Eneas: se trata de dar vida a un personaje de trascendencia y poco desarrollado, como es el caso de Lavinia.
El resultado de tal homenaje es una propuesta de gran originalidad, complejidad y belleza narrativa, destacando sin duda esa forma de mostrar a Virgilio y a Lavinia frente a frente para reflexionar sobre el papel de ella en la historia: "Sé quién fui, y puedo decirte quién podría haber sido yo, pero ahora solo estoy en esta línea de palabras que escribo (...). Hasta donde yo sé, fue mi poeta el que me otorgó realidad".
Lavinia es un personaje cargado de fuerza que te deslumbra desde las primeras páginas. Es apasionada, inteligente y sensible; una mujer que no duda en asumir su destino con determinación, cumpliendo con las profecías de los manantiales sagrados, lo que le conducirá hasta Eneas.
Estamos en marzo y yo ya sé que esta será una de mis lecturas favoritas del año, en parte gracias al hecho de haber contado con Mónica (Serendipia) y Marisa para compartir nuestras impresiones. Imprescindible.
No me habría parado en este libro para nada, e incluso reparando en el lo habría dejado pasar, pero es difícil resistirse con reseñas como esta.
ResponderEliminarBesos.
No sé por qué, había encuadrado los libros de esta autora en el género fantástico, pero veo que se atreve con casi todo. No lo conocía, pero suena muy bien. Le echaré un ojo a más reseñas.
ResponderEliminarUn beso ;)
Buenos días:
ResponderEliminarQué propuesta tan sugerente nos traes. El mundo clásico es sin duda una fuente inagotable de buenas ideas. Me apunto este título para un momento de paz y deleite literario.
Un abrazo
Qué bonito homenaje el que la autora hace a Lavinia. Tomo nota de la recomendación y no descarto leer, además, la Eneida.
ResponderEliminar¡Besos!
Hola,
ResponderEliminarsiempre me da "miedo" entrar a leerte porque acabo saliendo con un libro más en mi lista y hoy no ha sido distinto, ha sido peor porque desde que he visto el título y la portada sabía que inevitablemente lo iba a apuntar; así que apuntado queda, no me puedo resistir a lo que cuentas.
Un beso, Rocío
Qué genial esta lectura, Rocío, ya sabes que las tres hemos coincidido. Además de lo que comentas con tanto acierto, te confieso que he disfrutado mucho de cómo Ursula K. Le Guin narra los mitos fundacionales de Roma y ese crisol de culturas y dioses que era el Lacio en la época. Besos.
ResponderEliminarCon vuestras reseñas, es imposible dejar escapar este libro.
ResponderEliminarBesotes!!!
Yo también tengo claro que será uno de tus libros del año. No creo que lo sea del mío a no ser que se animen en la biblio. Pero bueno, ya veremos qué pasa, no se puede pasar por alto tanta fascinación.
ResponderEliminarBesotes
Le tengo ganazas, es una escritora que me gusta mucho.
ResponderEliminarBesotes
Huollllaaaaaa.
ResponderEliminarNo he leído nada de esta autora, lo confieso, pero creo que ahora mismo no me apetece un título así. Como siempre, si tienes algún otro que recomendarme, cuéntame.
Besotes.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarVengo de leer a Mónica y las dos resaltáis las mismas cosas, así que si ya estaba apuntado, requeteapuntado queda :) No he leído nada de Le Guin y me apetece mucho más esta novela que su ciencia ficción.
Eliminar¡Besote!
(he eliminado el otro, que había escrito mal el apellido de la autora, sorry)
¡Hola!
ResponderEliminarMe has dejado con unas ganas tremendas de leerlo, y eso que aún no he probado nada de Le Guin.
Me lo llevo apuntado^^
¡Un saludo!
Ohh, que portada mas bonita! Y hasta parece ser que hay una familiar, jijiji, en serio tu entrada me tienta con su lectura.
ResponderEliminarPodria probar, gracias! saludosbuhos.
Me gustan mucho estas novelas que dan brillo o un personaje poco presente en grandes obras de la literatura. Eso me pasó con Circe, de Madeline Miller. Por lo que cuentas, creo que me va a gustar, así que me lo llevo... ¡Pero qué labia tienes! jijijiji. Abrazos.
ResponderEliminarPues tú y Lavinia habéis conseguido seducirme completamente. Tomo nota de este libro. Últimamente estoy por lecturas con regusto romano. Me dispongo a leer esta semana "El hijo de César" de John Williams.
ResponderEliminarFeliz semana. Un beso
Yo te veo tan convencida y estoy tan poco segura de que sea una lectura para mí. Al menos en estos momentos, no, pero me la llevo apuntada. Y así tengo unos cuantos ya.
ResponderEliminarBesos