Cien noches. Luisgé Martín.

 "El amor erótico entre dos personas dura como máximo cien coitos. Cien encuentros. Cien noches. A partir de esa cifra todo es previsible y ordinario. No desaparece el deseo, pero sí la perturbación. No desaparece el placer, pero sí el asombro".


Cuenta Luisgé Martín que comenzó esta novela en una bonita habitación de hotel compartida con su marido, tan bonita que bien “habría merecido un adulterio”. La dejó aparcada hasta meses después. Afirma también que es una novela sobre infidelidades y adulterios. Intentó documentarse a través de historias cercanas, de familiares y amigos, pero la mayoría callaron o mintieron al respecto, por lo que tuvo que acudir a otras fuentes.

Cien noches parte de una premisa (si estamos de acuerdo con ella o no es otra historia): la mitad de los seres humanos confiesa ser infiel. ¿Qué pasa con la otra mitad? Pues con esa otra mitad que lo niega, un excéntrico millonario decide llevar a cabo un experimento antropológico investigando (y espiando) a poco más de seis mil personas. Irene, psicóloga, será una de las investigadoras; ella decide poner su propia sexualidad al servicio del proyecto (tonta que es Irene), pero la cosa se complica cuando se enamora de uno de los investigados (o eso plantea el autor, porque para mí, la verdadera historia de amor es la que tiene lugar con otro de los personajes). Confieso que, a priori, este argumento no fue suficiente para captar mi atención, pero ver una entrevista del autor me hizo cambiar de opinión. Hay mucho en lo que bucear tras esa sinopsis.

Esta no es esta una novela erótica, aunque hay sexo en casi todas sus páginas. No sabría catalogarla, aunque cada vez me gusta menos eso de las etiquetas, y creo que sería simplificar demasiado una historia de semejante complejidad narrativa y naturaleza reflexiva (estos son, sin duda, los aspectos que más me han convencido, destacando el “cameo literario” de autores como Edurne Portela, Sergio del Molino o Manuel Vilas, que se han prestado a colaborar aportando cada uno un capítulo). Eso sí, en algún momento creí estar leyendo ciencia ficción, porque en algunos aspectos no me parece creíble.

Llegados a este punto, poco más puedo decir. Es una lectura algo perturbadora, no lo voy a negar. Si lo llego a leer hace unos años seguramente no habría llegado hasta el final, pero  ahora tengo la curiosidad a flor de piel y no soy la misma lectora; es un libro que no me ha dejado indiferente, y me ha hecho pensar. Mucho. 


Comentarios

  1. Reconozco que con ese "Mucho" que has puesto al final me has hecho dudar un poco, aunque a priori el libro no me llama demasiado. Creo que por el momento no lo voy a apuntar en la lista interminables de libros que quiero leer.

    ¡Besos!

    ResponderEliminar
  2. Este libro lo conocí por el blog de Cosasqmepasan.com y con su reseña me reí lo que no está escrito... Creo que esta lectura no es para mí, pero me alegro de que no te dejara indiferente.
    Besos.

    ResponderEliminar
  3. A mí desde luego me has dejado con mucha curiosidad, jajaja. Y es cierto que no hubiera imaginado que tú leerías este libro pero hay que ver cómo nos vamos abriendo a nuevas historias que, si nos encasillamos, nos pueden sorprender.
    Voy a bichear un poco.
    Besos

    ResponderEliminar
  4. No me termina de convencer, aunque que te haya hecho reflexionar mucho al final me ha dejado con una pizca de curiosidad.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
  5. Tenía ganas de leer tu opinión, así que me dejas con curiosidad... ¿Qué haríamos sin ella?

    ResponderEliminar
  6. Un libro sin duda curioso, creo que me gustaría.
    Besos.

    ResponderEliminar
  7. Buenas tardes, Rocío:
    Con lo que nos has contado, no creo que nadie quedara inmune tras leer el libro. A mí me pasa al contrario que a ti, hace años lo hubiera leído con mucha curiosidad (me gustaba bucear en la conducta humana más escondida), ahora mismo esa faceta del ser humano ya no me interesa tanto, porque creo que es evidente que somos en líneas generales inconstantes. Los años y lo que vemos mientras transcurren destapan muchas cosas.
    Muy interesantes tus reflexiones. Siempre es un placer pasar a leerte.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. Pues yo no tengo ganas de pensar tanto. Y qué quieres que te diga, pues que los que confiesan ser infieles muchos también miente y que la gente por lo general hace bastante menos de lo que dice. El tema tiene su atractivo y daría para mucho pero ahora mismo prefiero que me cuenten aventuras del tipo que sea pero no estudios científicos de comportamientos humanos, tú me entiendes. Igual que yo entiendo que el momento vital es muy importante en relación a las lecturas.
    Besotes

    ResponderEliminar
  9. Me has convencido, algo distinto y que hace pensar.
    Me lo anoto.

    ResponderEliminar
  10. Hace tiempo que quiero estrenarme con Luisgé Martín porque todos habláis bien de sus novelas, pero no creo que empiece por esta. No acabo de hacerme una idea pese a lo bien que te explicas, jajajaja, quiero decir que ¿hay sexo en cada página pero no es una novela de sexo? ¿es una novela? Ay, mira, que empiezo por otra. Besos.

    ResponderEliminar
  11. Pues está claro que este es de esos libros que de primeras no transmite lo que contiene. Vamos, que lo que cuentas no tiene nada que ver con lo que había imaginado sobre el libro. Y me llama muchola atención... no sé si acabaría gustándome o no, pero intentarlo sí que me apetece. Apuntado queda.

    ¡Besote!

    ResponderEliminar
  12. Me encanta este autor. He leído algo suyo, suelto, aquí y allá, y siempre me ha dejado impresionada y, como dices, con la pregunta dándome vueltas. Este tiene una pinta genial. Habrá que echarle un ojo. Besos

    ResponderEliminar
  13. Te pregunté, ¿recuerdas? Y vi después la entrevista en Página 2 yotra vez me volvió a tentar, pero cada vez que voy a mi librería vuelve a estar agotado, y en la biblio no lo pillo ni a tiros, y pienso, ¿será el destino? Pero me sigue tentando, argggg.

    ME ha encantado cómo lo cuentas.
    BEsazo.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

¡ Gracias por comentar !