El perro que me cambió la vida, de John Dolan.

Los que tenemos perros sabemos el poder que tienen para transformar nuestras vidas. A veces conservamos el ego que nos hace pensar que somos nosotros los que los que cambiamos sus vidas, les damos un hogar y les cuidamos. Pero no; sus lecciones de generosidad, su altruismo y su cariño siempre serán superiores al del ser humano. 

Todos conocemos algún caso, cercano o no, de personas que se encuentran o se sienten solas, que han abandonado toda esperanza o se sienten en un estado de desmotivación del que es muy difícil sacarlas. Cuando tienen un perro se ven obligadas a pasearlo, a cuidarlo, a ser responsable de un ser vivo; pronto caen rendidas al cariño incondicional de estos animales y van viendo luz donde antes había apatía y tiniebla.

"El perro que me cambió la vida" cuenta una de esas vidas, la de John Dolan, un hombre que tras una infancia complicada cae en manos de la soledad, las drogas y la delincuencia, hasta que acaba viviendo en la calle. Pero John es generoso, y en 2009, pese a vivir en la pequeña habitación de una pensión, acoge a una pareja joven que no tienen donde dormir. A esta pareja le conceden una vivienda donde no pueden llevar al perro George, recién adoptado,  puesto que ya tenían otro y no pueden llevar a los dos. Es entonces cuando le piden a John que se lo quede y cuide de él. Nuevamente, en un acto de generosidad, pues no tiene medios ni para mantenerse él, John aceptará.


"Sin George yo no habría vuelto a coger el lápiz tras haber descuidado mi talento durante varias décadas (...) Sin duda, habría acabado tirado en cualquiero parte, en la cárcel o a dos metros bajo tierra."

Esta es la historia de cómo un perro cambia la vida de un hombre que ha tirado la toalla. Un hombre que hasta entonces estaba atrapado en una espiral de indigencia, delito, depresión y drogas. Una novela que nos habla de superación, esperanza y amistad. Un ejemplo inspirador, pues John retomó su actividad de dibujar, volvió a cultivar su afición en la calle...empezó a ser visible para los transeúntes... incluso para algunos críticos de arte.

El libro se acompaña de los dibujos del propio autor, dibujos con los que se ha ido ganando la vida y con los que ha salido del pozo en que se encontraba.  Una vida que merece la pena ser conocida.

"Cuando se puso el sol y el día llegó a su fin, el artista John Dolan y su perro George vivieron felices por nunca jamás."





Comentarios

  1. Me ha recordado un poco a la historia del gato Bob que me encantó, así que anotado queda
    Besos

    ResponderEliminar
  2. Tiene que estar genial el libro pero creo que ahora mismo no es mi momento para esta lectura, hace un mes, aproximadamente, perdí a mi Jara (mi perrita, tenía 15 años) y lo he pasado y lo estoy pasando realmente mal; así que... espero poder leerlo en otro momento.
    Muchas gracias por la entrada.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  3. Tengo muchas ganas de leerlo, como la de Un gato llamado Bob. No se me escapará :-)
    Besos!

    ResponderEliminar
  4. Me ha parecido una historia preciosa. Me he emocionado leyendo tu reseña.
    A mí me ha cambiado la percepción que tenía sobre los animales desde que tengo a Lole.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  5. Pues parece toda una inspiración esta historia, me apunto la recomendación sin duda, y es verdad, es increíble lo que nos pueden aportar estos animales.

    Besooss!!

    ResponderEliminar
  6. Los animales son estupendos. Nos ayudan, nos cuidan, y en ocasiones nos cambian la vida. No sé si me atreveré con el libro, pero bueno es conocerlo. Un beso.

    ResponderEliminar
  7. Me gusta. Hace poco leí un reportaje sobre la terapia con animales para los niños con problemas cognitivos o psicológicos, y me quedé gratamente sorprendida de la capacidad del vínculo entre persona y animal. Bss

    ResponderEliminar
  8. Estoy leyendo ahora Un gato callejero llamado Bob, que me está gustando mucho y, por lo que comentas, ésta se le da un aire, así que la tendré en cuenta.

    ResponderEliminar
  9. ¡Qué bonita historia! Todos los que tenemos perro sabemos cómo nos salvan de los malos momentos... Esos días en los que llegas a casa sin ánimo ni ganas de nada más que acurrucarte en el sofá y llorar y no tedejan. Te miran a los ojos, te rindes, bajas a la playa y se te pasan todos los males. No nos damos mucha cuenta, pero son ellos los que cuidan de nosotros y no al revés.

    Besos

    ResponderEliminar
  10. Esté lo voy a dejar pasar. Besos.

    ResponderEliminar
  11. Me gusta este tipo de historias, pero prefiero verlas en formato audiovisual.
    Por cierto, tu perro es infinitamente más guapo que el de la portada.

    Besos.

    ResponderEliminar
  12. Es una historia muy conmovedora pero me conformo con lo que has relatado tú. No me llama la atención saber más detalles.
    Un beso

    ResponderEliminar
  13. Adoro a los animales, me han acompañado durante toda mi vida y me han mantenido a flote en los momentos más difíciles, así que semejante historia conmueve, y eso que ni la he leído, pero con esta entrada has dicho mucho. Me gustaría leerla, sí, gracias por la recomendación :)

    Besos.

    ResponderEliminar
  14. Me ha recordado a "El gato Bob" :)
    Lo voy a dejar pasar, pero me alegro que te haya gustado
    Besos

    ResponderEliminar
  15. Curioso que incluya esas ilustraciones del propio autor, me gusta el detalle.

    La historia a mí también me parece preciosa. Si cualquier detalle puede cambiar nuestras vidas, ¿cómo no van a hacerlo las personas o los animales cuando los tenemos siempre a nuestro lado, día a día?

    La desconocía y me la llevo, que cuando las cosas se vuelven un poco grises apetecen lecturas así.

    Besines, Meg!

    ResponderEliminar
  16. No me importaría leer esta historia si se cruza en mi camino.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
  17. Qué bonito!! Parece una buena historia.
    Abrazo!

    ResponderEliminar
  18. No suelo leer historias donde hay animales por medio. Me afectan mucho aunque como esta tenga un tono esperanzador.

    ResponderEliminar
  19. Como Esperanza Aguirre lea este libro es capaz de despedir a todos los asistentes sociales de Madrid y soltar manadas de perros por las calles para sustituirlos :P

    ResponderEliminar
  20. Ay, ¿qué te digo yo de como los animales nos enseñan cosas? Ya sabes, aunque su relación no sea estrecha con quienes están con ellos dan mucho más de lo que una se piensa (ya sé lo que me vas a decir).
    Dentro de los estereotipos de persona sin hogar y demás está lo de los perros ¿no resulta en parte bastante lógico? es decir, que den apoyo, cariño a quienes nosotros (personas) no llegamos/damos/etc. ya sabes que en esto ando muy metida y no quiero dejarte un testamento.
    Del libro me gusta, sobre todo, que sea real, que pasen estas cosas.
    Un besote

    ResponderEliminar
  21. ¡Hola!
    A mí me tiene buena pinta. Pero, amante de los animales como soy, no podría ser de otro modo. Si encuentro un hueco entre tanto pendiente, lo leeré seguro. :)
    Gracias por la reseña.
    Besos y feliz fin de semana.

    ResponderEliminar
  22. Los perros son mi debilidad y la literatura perruna es uno de los géneros que más disfruto. Esta historia me parece realmente inspiradora y si la pillo, seguro que la leo. 1beso!

    ResponderEliminar
  23. ¡Hola! No suelo leer libros de este tipo, pero esta historia me gusta y creo que le daré una oportunidad si lo evo por la biblioteca.
    ¡Gracias por la reseña!
    Esther.

    ResponderEliminar
  24. Entrañable libro y como dices, sobre todo para quien tenga perro, yo ahora no tengo pero me crié con uno que fue uno de mis mejores amigos, todavía no he superado su marcha, ya muy mayor y ciego, parece exagerado pero fue duro para mí, mucho, como te digo, crecí con él. En todas las fotos de infancia de casa salimos juntos :) Un beso.

    ResponderEliminar
  25. Bonita historia. Se nota que te ha tocado el corazoncito por el cariño que desprendes en la reseña. Abrazos.

    ResponderEliminar
  26. Hola! (✿◠‿◠)
    Soy Arya del blog El Rincón de Arya
    http://elrincondearya.blogspot.com.es/
    No lo conocía, pero se ve muy curioso este libro :3 me lo apunto!
    Me gusta mucho tu blog, te sigo!

    Besos.

    ⏃♥ Arya ♥⏃

    ResponderEliminar
  27. Cuánta razón tienes, Meg: pensamos que somos nosotros los generosos, dándoles comida, casa, atenciones y cariño.... Y ellos nos dan cada lección... Me gusta la historia que nos traes, y esas ilustraciones del propio autor. Gracias.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  28. Nunca he tenido perro pero entiendo el cariño que se le puede coger a una mascota. Personalmente creo que lo de tener perro no va conmigo (un tema más bien egoísta porque no quiero tener tanta responsabilidad) El libro parece bonito. Me alegro de que lo hayas disfrutado.

    Besos!

    ResponderEliminar
  29. Este es de los míos, me va a gustar seguro. La de veces que mis perros me han enseñado cosas o me han hecho ver el día mejor de lo que lo veía...
    Genial la reseña.
    Un beso!

    ResponderEliminar
  30. Parece un libro entrañable.
    Besos!

    ResponderEliminar
  31. Meg, ¡cuánta razón en tus palabras! El bien que nos hacen los perros no se equipara con el que le hacemos nosotros. No conocía este libro. Me resulta interesante y curioso. Si lo veo, lo pillo. Besos.

    ResponderEliminar
  32. Vaya por delante que los animales me encantan y que doy fe de lo que puede hacer un perro cuando irrumpe en tu vida, aunque sea sin llamarlo... pero el libro no es para mi.
    No es este un tipo de lectura del que disfrute
    Besos

    ResponderEliminar
  33. Es una historia conmovedora sobre la que ya leí alguna noticia en prensa. Aunque el libro en sí no me atrae mucho.Besos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

¡ Gracias por comentar !