Suite 235 , de Norah Bennett .

Creía yo que era la única que tengo secretillos blogueros o litrerarios, pero no. El pasado 17 de abril leí una entrada de nuestra bloguera Norah, de "En un rincón de una cantina" que  dejaba temblando mis gafas: Norah nos presentaba "Suite 235", una pequeña novela (o relato largo) de 110 páginas sobre una mujer que ha construido con mucho esfuerzo y poca suerte una vida sencilla en un pueblo pequeño en el que sólo puede tener sueños pequeños.

Coincidió que tengo la costumbre de hacer lecturas cortas los fines de semana, así que no lo dudé. La leería en el fin de semana. No contaba con que al empezar ya no podría parar y que iba a renunciar a mi preciada siesta de los domingos, así que finalmente me duró entre las manos tan sólo un par de horas. La reseña requería cierta preparación, asi que mientras me fui a Amazon a dejar mi valoración de la novela.

Candela es una mujer algo solitaria que reúne con sacrificio dinero suficiente para poderse ir unos días de vacaciones a un balneario que normalmente no se podría permitir. En su estancia en el referido balneario decide acudir al spa. Sin esperarlo, un hombre se acerca a ella y le susurra al oído "Suite 235". Candela debe tomar una decisión: hacer como que no ha ocurrido o dejarse llevar por un impulso, la inseguridad y la curiosidad suscitada por la proposición. Su vida a partir de entonces será completamente distinta...

Y hasta aquí puedo leer, puesto que no se desvela mucho más en la sinopsis y no seré yo quien lo haga. Sólo os diré que es una novela corta, pero intensa y adictiva. El estilo de Norah es sencillo y fluído y lo que más me ha gustado es su capacidad de reflejar situaciones reales y personajes de carne y hueso. Candela es una mujer poco agraciada, con complejos e inseguridades que tiene la sensación de que su vida es una simple repetición de días que no aportan nada nuevo mientras que la vida de los que le rodean va evolucionando, avanzando y cambiando. ¿Quién no ha tenido alguna vez esa sensación? Yo la he tenido y la he visto perfectamente plasmada en esta historia.

Candela está acompañada de secundarios que también gozan de credibilidad, aunque no es fácil encontrarlos en nuestra vida, y si los encontramos no hay que dejarlos escapar. Así, Candela cuenta con un jefe de lo más comprensivo y con un amigo de los de verdad, Javier, de esos que te dicen lo que piensan con mucha mano izquierda, que te muestran su apoyo incondicional pese a saber que te estás equivocando.

Creo que hablo en nombre de todos los que hemos leído esta historia cuando digo: Norah, gracias, me gusta, queremos más. Enhorabuena y mucha suerte en tu camino.